La Navidad, una de esas épocas que amas u odias pero que rara vez deja indiferente. Si eres de los que la aman, seguro que podrás disfrutarla fácilmente. Pero si eres de los que no sienten ninguna atracción por estas fechas, tendrás que hacer un esfuerzo para poderlas disfrutar de algún modo. Porque aunque trataras de ignorar estas fechas, todo a tu alrededor te lo recordaría. Y además, será difícil que no te toque celebrarla de algún modo, sea con la familia, con la cena de tus compañeros de trabajo u otra situación de la que no te puedas librar. Algunos (afortunados), pueden viajar en estas fechas y alejarse de todo aquello que no les interese, pero no es el caso de la mayoría de la gente.
Algunas ideas que te pueden ayudar a disfrutar de estos días:
- No le des vueltas. No le des muchas vueltas pensando si la Navidad es una fiesta comercial, o si tiene un sentido religioso que tú no compartes. Para mucha gente es una tradición y lo que están celebrando es su propia manera de ver esa tradición.
- Celebraciones con gusto. Si vas a una celebración, piensa en que te vas a reunir con gente a la que aprecias y que tal vez no tienes muchas ocasiones de ver. Disfruta de esa oportunidad.
- Atención en lo positivo. Puede darse el caso que entre la gente con la que pasas estos días, haya alguna persona que no te cae especialmente bien. No pongas tu atención en eso y trata de fijarte más en los demás, que son el motivo de que estés ahí.
- Moderación en las comidas. Come y bebe sólo lo que te apetezca. Años atrás, las fiestas navideñas eran un ocasión perfecta para comer cosas que no se comían el resto del año. En la actualidad, en la mayoría de los casos no es así, ya que no pasamos esas restricciones alimentarias (aunque lamentablemente con la crisis, esto vuelva a estar sucediendo). Por eso, no hace falta atiborrarse hasta sentirse mal. Come lo que realmente va a hacer que te sientas bien. Y si tienes ocasión, modera los preparativos ya que la mayoría de las veces se pueden celebrar las fiestas con mucho menos, sin derrochar ni despilfarrar.
- Gastar con cabeza. Esa actitud de moderación la puedes aplicar también en los regalos. Muchas veces nos sentimos no sólo obligados a regalar, sino a gastar determinado importe. Avisa si quieres, pero cambia esas obligaciones por regalos artesanales, o hechos por ti mismo, en que lo importante sea el cariño puesto en el regalo y no el gasto. Y obviamente, si quieres y puedes gastar dinero en alguien porque realmente así lo sientes, hazlo.
- Sentirte especial. Cómprate algo que normalmente no comprarías y póntelo bajo el árbol. Ábrelo el día 25 cuando te levantes.
- Decora con cariño. Pon algunos adornos en tu casa. No es necesario que la sobrecargues, pero existen multitud de adornos de todos los estilos y también puedes optar por unas ramas de abeto o algo natural. Simplemente pon algo que te haga sentir que son unos días algo diferentes.
- Aprovecha el tiempo libre. Aprovecha los días que tengas libres para descansar, dar un paseo por la playa o la montaña o hacerte una maratón de tu serie favorita.
- Sé solidario. Haz algo por los demás. Cada vez está más demostrado que una de las mejores maneras que tenemos para sentirnos felices es ayudando a los demás.
- No te fuerces. Y sobretodo, no te sientas obligado a estar feliz. Hay personas que se ponen melancólicas en esta época del año, en que los días son más cortos, hace más frío, etc…Sentirse obligado a estar contento puede provocar el resultado completamente opuesto, que te sientas fatal.
Al final, se trata de disfrutar con lo que hay y no con lo que nos gustaría que hubiera. Muchas veces en la vida, las cosas son como son y pelarse con la realidad no suele dar muy buen resultado. Y no estoy hablando de ser conformistas, sino de ser capaces de diferenciar lo que merece la pena cambiar y lo que es mejor aceptar. Y amargarse por la Navidad, creo que es un gasto de energía excesivo que además te va a servir de poco. Así que trata de pasarlo bien, sonreír con la ilusión de los niños y recordar lo afortunado que eres de poder ver otra Navidad. ¡Feliz navidad!
¿Se te ocurre alguna idea más para disfrutar?
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